¿Cómo lo piensan los ricos? Alguna vez te has preguntado por qué tienen más que tú y qué hacen para tener lo que tienen…
Estas interrogantes se hacen más fáciles de digerir cunado expertos como Robert Kiyosaki nos cuenta cuáles son esos factores que influyen y marcan la diferencia.
Todo ser humano nace libre y en igualdad de condiciones, sin embargo, el que uno sea rico y otro no influye en la forma de pensar.
Algo lo que se diferencia ampliamente una persona acaudalada de una que no tiene ingresos.
La riqueza y la pobreza son algo que comienza en la forma como nos veamos y pensemos de nosotros mismos.
Así como tiene que ver con la forma que miramos la vida.
Si alguien concibe la vida como algo donde no puede alcanzar sus sueños y se siente frustrado, así vivirá, siempre, a menos que cambie su manera de pensar.
Todo lo contrario de quien encuentra en las limitaciones la fuerza para seguir adelante a pesar de los contratiempos.
Estas dos formas de ver y vivir la vida afectan de manera trascendental al ser humano y repercuten claramente en su salud financiera.
¿Cómo te ves?
Es por ello que el experto en finanzas Robert Kiyosaki narra cómo piensan los ricos…
El autor de un clásico y a la vez exitoso libro sobre finanzas personales Padre Rico Padre Pobre es un audaz empresario que se dedica a enseñar cómo hacer bien las cosas cuando se trata de dinero.
A lo largo de los años se ha pasado dictando conferencias sobre qué es lo que se debe y no hacer para alcanzar la libertad financiera.
Algo que toda persona anhela pero que conlleva un precio que solo unos cuantos se arriesgan. Dado que todos tiene la posibilidad pero el concretarlo o no comienza en la mente.
¿Cómo lo piensan los ricos?
Los ricos piensan en una manera muy distinta sobre lo que es el dinero.
La primera diferencia entre la mentalidad de una persona rica y una mentalidad pobre es el concepto mismo de riqueza. Para éstos últimos, posiblemente la fortuna se mida en la cantidad de dinero que ingresa en la economía personal o familiar. Cuanto más se gana, más rico se es.
Sin embargo, el rico mide su riqueza en términos de tiempo: cuánto se puede vivir con el dinero ahorrado, o cuánto puede una persona sostenerse sin tener que entregar tiempo a cambio de un salario. En conclusión, rico es quien puede pasar más tiempo viviendo cómodamente sin tener que trabajar.
Un rico no gasta sino al final, antes de eso…
Ahorrar es la primera prioridad en la mentalidad de un rico. El ahorro le permite tener el colchón financiero para posteriormente invertir.
Robert Kiyosaki lo explica de la siguiente manera:
“Las personas con “mente de ricos” con su salario en la mano, piensan primero en ahorrar, luego en invertir y por último en gastar”.
Y señala que otra diferencia fundamental entre estos esquemas mentales es la relación entre los ingresos percibidos, los ahorros y los gastos. Una persona que sólo piensa en gastar el dinero que gana no logrará un éxito financiero a futuro.
¿Por qué? Porque así van construyendo un colchón que pueden utilizar luego, para emergencias o para placer, mientras buscan alternativas para multiplicar ese dinero ahorrado.
Las metas financieras están ausentes en la mente de quienes se ven pobres | ¿Cómo lo piensan los ricos?
Así como existen las metas de estudiar y graduarse del colegio o universidad, la vida financiera también requiere metas a corto, mediano y largo plazo.
Es por eso que Robert Kiyosaki habla sobre la importancia de estas para proyectarse y alcanzar los objetivos, la libertad en esa área, etc.
Dentro de la mentalidad de los pobres no hay una estrategia financiera concreta. Más bien, cuanto más ganan más gastan y así se va modificando su estilo de vida. Para transformar profundamente la realidad económica hay que establecer metas financieras claras y entender que el presupuesto no tiene que ver con el dinero disponible, sino con el objetivo a alcanzar.
Cero deudas, pago de contado
Una de las grandes diferencias entre un rico y un pobre es la manera se pagar por algo que quiere.
El que piensa como pobre saca las cosas fiadas, a préstamo, etc. Es decir, se endeuda para pagarlo por cuotas. Y, aunque cree que hizo bien, en realidad está pagando por el doble aquello que compró.
Lo que no hace un rico o quien tiene mentalidad de rico.
Las personas con mentalidad de millonario: sólo compran cuando pueden pagar el valor total en efectivo. Por más atractivos que suenen, los planes de financiación sólo comprometen los ingresos, la única base económica de la mayoría de las personas.
Por eso, quienes tienen “mente de ricos” ahorran para poder comprar y buscan maneras de obtener ingresos que no dependan del empleo, entradas alternativas de dinero redituables y pasivas, como las inversiones.
Estos son algunos de los puntos básicos que distinguen lo que piensan los ricos de los pobres. Siguiendo estas pautas, es posible introducir algunos cambios en el estado financiero que contribuyan a generar mayores ingresos, trabajar menos y vivir de forma más placentera y tranquila.
El cuadrante del dinero, un autoanálisis para saber en qué nivel se está
Una técnica muy conocida de Kiyosaki es el cuadrante del flujo del dinero, el cual habla sobre las cuatro posiciones en las que puede estar el ser humano respecto a las finanzas.
Estas posiciones son las del empleado, el auto empleado, el dueño de empresa y el inversionista.
Cada una de ellas tiene que ver con la forma en como se conciba la persona y el rol que asume en su vida financiera.
En el lado derecho del cuadrante están las figuras de empleado y autoempleado, las cuales hacen referencia al que trabaja para otro.
Es decir, al que vive dentro del sistema y aunque quiere aspirar a más, su miedo a lo nuevo, a soltar la seguridad del sueldo mensual fijo no lo deja.
Asimismo lucha con la idea de emprender pero es más fuerte el pensamiento de quedarse sin empleo seguro. Sin un ingreso constante.
Por otro lado tenemos al auto empleado, ese que logró vencer el miedo al emprendimiento y ahora ofrece un servicio, vende un producto, etc.
Él es su propio jefe y lo que más valora es la libertad que tiene para disponer de su tiempo.
A diferencia del que sigue empleado pueda decidir a que hora empieza a trabajar y a qué hora termina. Su ritmo de trabajo, etc.
Libertad, lo que más valora el autoempleado | ¿Cómo lo piensan los ricos?
Además de disfrutar del hecho de ser su propio jefe, un autoempleado se deleita en la libertad que posee.
Ya no tiene que cumplir un horario en la oficina sino que decide cuándo, cómo, dónde y a qué hora iniciar o terminar sus labores.
Sale y llega cuando lo desea así que, lo que más valora es esa sensación de libertad que siendo empleado no tenía.
Esa libertad le parece más importante que el dinero, aunque ello les suponga trabajar muy duro sin delegar funciones, ya que no confían en que otras personas puedan hacer el trabajo igual de bien que ellos.
