El mercado laboral en España.

¿Qué pasa con el empleo en España y por qué los índices muestran estas caídas o menor impacto que en años anteriores?

Cada verano es de por sí la temporada donde los empleos son abundantes y gran parte de la población española está activa.

Sin embargo, este año las cosas son diferentes y en vez de una gran ocupación, como se esperaba tras dos años de pandemia, ocurrió todo lo contrario.

El Ministerio de Seguridad Social ha dicho que este es el tercer peor verano de toda la última década para el mercado laboral español.

Sólo por detrás del de 2019, en el que se perdieron 194.156 puestos y del de 2012, cuando la temporada estival acabó con 218.039 empleos menos.

Y es que en el país europeo se presentó el siguiente fenómeno:

Para Julio hubo una pérdida de 7.366 empleos, la destrucción de 189.963 puestos de trabajo en agosto y la creación de 40.000 empleos en septiembre.

A modo de información, para julio de este año, además de la pérdida de empleos hubo una incorporación de 3.230 personas a las listas del paro del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE).

Datos sobre el mercado laboral en España

Esta pérdida de empleos experimentada en julio de este año deja el número total de trabajadores dados de alta a la Seguridad Social en 20,34 millones.

Esto es un 3,8% más de los que había hace un año o 749.236 ocupados más.

Toda la destrucción de trabajos recayó en las mujeres, ya que el número de afiliadas bajó en 55.365 trabajadoras mientras que el de hombres aumentó en 48.000.

La cuestión está en que si se compara el saldo de todo el verano con el de los últimos diez años, sólo se encuentran dos registros peores al actual:

Uno en 2019, cuando el ciclo económico empezaba a agotarse y el crecimiento se frenaba, y otro en 2012, en plena crisis de la deuda soberana.

En el promedio de los años 2010-2018 la destrucción de empleo que se ha registrado de media en el tercer trimestre ha sido de unos 105.860 empleos, 50.000 menos que los perdidos en esta ocasión.

Para el año pasado 2021, el verano terminó con 30.834 puestos nuevos más y 2020, con 252.052.

Mientras que en 2018 la pérdida fue de 144.277; en 2017, de 96.945; para 2016, de 48.250; en 2015, de 66.589.

Las pérdidas en el 2014, de 23.292, y en 2013, de 88.420.

La esperanza está puesta a partir de septiembre

Con el invierno a la vuelta de la esquina, la esperanza para alcanzar una mejora en el área laboral, está puesta en los 40.000 empleos generados este mes de septiembre.

Así lo anunció José Luis Escrivá, líder del Ministerio de Seguridad Social.

Él espera que tras la situación de los últimos dos meses, septiembre sea el mes donde se recupere el “dinamismo” del mercado laboral.

Tanto el propio ministro como su equipo insistieron en que los datos de empleo que se publican mes a mes no deben compararse con los de 2021 o 2020.

Por tratarse de años “atípicos” en los que la creación de empleo fue muy fuerte tras el impacto de la pandemia.

¿Qué llama la atención? | El mercado laboral en España

Tras detallar información sobre la pérdida de empleo en España en los párrafos anteriores hay que hablar sobre los sectores donde más sen producido estas bajas.

Son sectores fundamentales para la sociedad, estamos hablando de la agricultura, la educación y la construcción.

España es un país que se caracteriza por producir sus propios alimentos, por supuesto que también importa, pero es una nación que cultiva la tierra, come de su fruto y exporta al resto de Europa.

Así que las pérdidas en la agricultura son un factor curioso y de mirar con cautela.

Asimismo, el sector de la construcción es el otro más afectado, tomando en cuenta que es muy importante para el crecimiento de la economía.

Y el otro en esta lista negra es el de la educación, el cual constituye un fundamento para el desarrollo social y moral de la población.

Después de un julio que suele ser positivo para el mercado laboral, agosto siempre supone el fin de muchos contratos por el fin de la temporada estival y este año no ha sido una excepción.

Aún así, los despidos registrados este año no han sido tan altos como los que se produjeron en 2018 y 2019, pero en esos ejercicios se venía de crear empleo el mes anterior.

Se espera que con los 40.000 nuevos empleos la economía tenga un respiro

A sólo un día para que septiembre culmine se tiene la esperanza de que la creación de 40.000 puestos de trabajo en el país den un respiro a la economía.

Esta cifra es un 30% menos que el año pasado pero una cantidad de empleos muy superior a la registrada en los años anteriores a la pandemia. 

Al conocerse estos datos, fuentes del Ministerio de Seguridad Social quisieron evitar la comparación con 2021 e insistían en que “es lo suyo” mirar los datos prepandemia.

Comparar con los años previos al covid deja la evolución del mercado laboral en septiembre en muy buen lugar, pero no ocurre lo mismo cuando se coge el verano completo.

Aún así, Escrivá presumió de los resultados:

“El dato sería bueno en cualquier contexto, más notable aún en el contexto de inflación”, destacó, al tiempo que subrayó la de la calidad del empleo tras la entrada en vigor de la reforma laboral.

La inflación está haciendo de las suyas | El mercado laboral en España

En el 2022 la inflación está haciendo de las suyas por todo el mundo y España no es la excepción.

Según su opinión, la “razón fundamental” por la que el empleo sigue siendo “resiliente” pese al entorno de incertidumbre en el que vive el país a nivel internacional desde principios de año está:

En que la pérdida de poder adquisitivo por la inflación se ve como algo “pasajero” y no modifica la “visión” y las decisiones de contratación de las empresas a medio plazo.

Abrimos cita textual del Ministro de Seguridad Social:

“Tiendo a pensar que la razón fundamental es que el conjunto de agentes de la economía está interpretando que esta perturbación que supone una pérdida de poder adquisitivo es de naturaleza pasajera y, por lo tanto, no modifica la visión de medio plazo que puedan tener las empresas, sobre todo en lo que determina sus decisiones de inversión y contratación, más allá de la estacional”, recalcó.

El Ministro no ha detectado pérdidas “significativas” de empleo en ningún sector en concreto ni ninguna debilidad especial y confía en que el mercado laboral siga comportándose con fortaleza.

Bajo este escenario, la apuesta del Gobierno por centrar todo el frente laboral en subir salarios (empezando por el SMI) lleva a un debate que parece situarse al margen de la situación del mercado laboral ante las decisiones del BCE.

Lo que no ayuda a que la política monetaria repercuta en un descenso rápido de la inflación en nuestras fronteras sin castigar el empleo.

Un atraso en la recuperación económica post pandemia

Tras la paralización de la economía mundial producto del Coronavirus los países está en busca de formas para recuperarse y volver a los estados previos al 2020.

Estados donde el empleo, el turismo, el costo de la energía y de la vida en sí, eran diferentes.

Según las últimas previsiones de la Comisión Europea (CE), actualizadas el pasado mes de julio, sólo siete países no habían recuperado todavía su PIB cuando arrancó el año: España, Italia, Alemania, Portugal, Austria, República Checa y Eslovaquia.

Pero si hablamos de números y estadísticas previas a la pandemia, Bruselas calcula que España, será la última en recuperarse.

Calcula que vuelva a esos niveles previos al Covid-19: entre octubre y diciembre del próximo año (2023).